Después de un nuevo juicio del caso, el tribunal de Knyaze-Volkonskoye condena a un testigo de Jehová, Valeriy Rabota, a seis años de prisión condicional por hablar de la Biblia

Después de un año y tres meses de procedimientos legales, Valeriy Rabota, de 62 años, recibió una sentencia suspendida. El 10 de junio de 2024, la magistrada del Tribunal de Distrito de Jabárovsk, Maria Luzhbina, equiparó la participación en cultos pacíficos con el extremismo.

El Comité de Investigación abrió un caso penal contra el creyente en la primavera de 2022. Durante este tiempo, pasó dos días en un centro de detención temporal, 116 días en un centro de detención preventiva y 100 días bajo arresto domiciliario. Durante los meses que pasó en prisión, las enfermedades crónicas de Valeriy empeoraron. Más tarde, mientras estaba bajo arresto domiciliario, sufrió un derrame cerebral. El caso llegó a los tribunales en marzo de 2023. Ocho meses después, en la etapa final del juicio, la jueza Angelina Sviderskaya se recusó y las audiencias comenzaron de nuevo.

Valeriy Rabota fue acusado de participar en las actividades de una organización extremista e involucrar a otros en ella. Sin embargo, el examen lingüístico indica que el creyente no alentó las acciones extremistas, sino solo "leer y estudiar el material en discusión", idea que fue enfatizada por el abogado: "Mi cliente está siendo juzgado únicamente por las formas en que se expresa su fe... Las acciones relacionadas con la participación en servicios religiosos con otros creyentes y la difusión de las propias creencias se basan no solo en la Constitución de la Federación de Rusia, sino también en la Biblia, fuente de las normas morales y la ley natural".

El oficial del FSB Stanislav Martyn, que fingió un interés en la Biblia para recopilar información sobre los creyentes, negó durante el interrogatorio que Rabota lo hubiera persuadido para unirse a las actividades de cualquier organización. Los testigos de la acusación hablaron positivamente de Valeriy. Uno de los interrogados, un oficial del FSB asociado con el caso del creyente, declaró que "no fue testigo de ningún delito por parte de Valeriy". Algunas de las personas interrogadas hablaron de falsificaciones en sus testimonios escritos y de presiones de la investigación. La defensa señaló violaciones de la ley por parte de expertos, por ejemplo, el erudito religioso M. B. Serdyuk evaluó las acciones de la creyente desde el lado legal, yendo más allá de los límites de su autoridad.

En el territorio de Jabárovsk, las autoridades abrieron 19 causas penales contra 41 testigos de Jehová. Uno de los creyentes murió bajo investigación, y los tribunales ya han dictado sentencias contra 20 personas.